Los problemas de la próstata son una realidad común para la mayoría de los hombres a medida que envejecen. De hecho, se estima que el 90% de los hombres mayores de 90 años sufre de agrandamiento prostático. Este crecimiento, conocido como hiperplasia prostática benigna (HPB), puede causar síntomas molestos como dificultad para orinar, necesidad frecuente de levantarse por la noche para ir al baño y, en algunos casos, afectaciones en la vida sexual.
Cómo reducir la próstata naturalmente
Sin embargo, la buena noticia es que existen formas de reducir la próstata y aliviar estos síntomas sin recurrir a cirugía. A continuación, cómo puedes mejorar tu salud prostática con cambios en la alimentación, suplementación y hábitos de vida.
1. Entendiendo el agrandamiento prostático y sus causas
La próstata es una glándula pequeña que rodea la uretra, ubicada debajo de la vejiga. A medida que envejecemos, las hormonas en nuestro cuerpo, como la testosterona y el estrógeno, tienden a desbalancearse, lo que puede provocar el crecimiento de la próstata. Además, factores como el sobrepeso y la resistencia a la insulina pueden agravar esta condición.
El desequilibrio hormonal, en particular el aumento de hormonas anabólicas como la insulina, el estrógeno y la DHT (dihidrotestosterona), contribuye al crecimiento del tejido prostático. Por esta razón, es crucial equilibrar las hormonas para evitar un mayor crecimiento de la próstata y aliviar los síntomas urinarios y sexuales asociados.
2. Alimentación para una próstata saludable
Una de las formas más efectivas para combatir el crecimiento prostático es a través de una dieta balanceada. La clave es reducir alimentos que contribuyan al desequilibrio hormonal y la inflamación en el cuerpo.
Evita alimentos que empeoran el agrandamiento prostático:
- Carbohidratos refinados y alimentos de alto índice glucémico: Estos alimentos elevan los niveles de insulina, promoviendo el crecimiento de la próstata.
- Lácteos: Estudios sugieren que el consumo de leche puede estar relacionado con el agrandamiento prostático.
- Alimentos procesados y envasados en plástico: Los disruptores hormonales presentes en los envases de plástico (agua en botellas de plástico) y alimentos no orgánicos pueden aumentar los niveles de estrógenos en el cuerpo.
Alimentos que debes incluir:
- Crucíferos: Verduras como el brócoli, coliflor y repollo de Bruselas son ricas en indol-3-carbinol, una sustancia que regula los niveles de estrógeno.
- Alimentos ricos en licopeno: El tomate, la zanahoria y el repollo colorado contienen licopeno, que ha demostrado reducir el tamaño de la próstata.
- Omega-3: Consumir más alimentos ricos en ácidos grasos omega-3, como pescados grasos y semillas, puede ayudar a reducir la inflamación.
3. Suplementos naturales para el tratamiento de la próstata
En conjunto con una dieta adecuada, existen suplementos naturales que pueden ayudar a regular el crecimiento prostático y mejorar los síntomas.
1. Ortiga (Urtica dioica):
La ortiga bloquea la enzima aromatasa, encargada de convertir la testosterona en estrógeno, reduciendo así los niveles de esta hormona en hombres con sobrepeso.
2. Maca:
Aunque no afecta directamente los niveles de testosterona, la maca ayuda a incrementar el deseo sexual y, al igual que la ortiga, impide la conversión de testosterona en estrógenos.
3. Palmito silvestre (Saw palmetto) y ciruelo africano:
Estos dos suplementos inhiben la acción de la 5-alfa reductasa, una enzima responsable de la conversión de testosterona en DHT, que es un factor clave en el crecimiento prostático.
4. Estilo de vida para una próstata sana
Además de la alimentación y los suplementos, adoptar ciertos hábitos puede marcar una gran diferencia en la salud prostática.
- Mantén un peso saludable: El sobrepeso aumenta la producción de aromatasa, que convierte la testosterona en estrógenos. Bajar de peso ayuda a equilibrar las hormonas y reducir el tamaño de la próstata.
- Evita los disruptores hormonales: Opta por alimentos orgánicos para evitar pesticidas que actúan como estrógenos en el cuerpo.
- Ejercicio regular: Mantenerse activo reduce la inflamación y ayuda a equilibrar los niveles hormonales.
5. ¿Es necesario recurrir a la cirugía?
En muchos casos, cambiar los hábitos alimenticios y tomar los suplementos adecuados puede ser suficiente para reducir los síntomas y mejorar la calidad de vida. Sin embargo, en casos más graves donde los síntomas no mejoran, puede ser necesaria una intervención médica. Existen opciones menos invasivas que la cirugía tradicional, como la terapia con láser o la embolización de arterias prostáticas, que pueden ofrecer alivio sin los riesgos de una cirugía mayor.
Conclusión:
El agrandamiento prostático no tiene por qué convertirse en una barrera para una vida plena y saludable. Con los cambios correctos en la dieta, el uso de suplementos naturales y la adopción de hábitos saludables, puedes reducir el tamaño de tu próstata y mejorar significativamente los síntomas sin necesidad de recurrir a la cirugía. La clave está en tomar acción cuanto antes y mantener un equilibrio hormonal adecuado a lo largo del tiempo.
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